Tú,tú,tú..#

Un día cualquiera de Agosto, en un parque cualquiera lleno de niños.

Está tirste, pero nadie se acerca a hablarle. Tan pequeño y ya conoce el dolor de la soledad. Mira a su alrededor y camina lentamente hacia los columpios más alejados de la multitud. Se sienta en uno de ellos, que chirria bajo su peso. Una chica lo escucha y se da la vuelta. Fija sus ojos en los de él. Tendrá su misma edad. Morena, ojos verdes y una sonrisa increiblemente blanca. Al verlo se acerca.
-¡Hola! ¿Qué te pasa? Parece que estás triste...
-Esque es mi cumpleaños y nadie me felicita...
-Yo no lo sabia. ¡Lo siento! Pero aun así, felicidades.¿Cuántos años cumples?
-Ocho.
-¡Ala! Yo cumplí los 7 hace poco.
Él sonrie por su cara de impresión.
-Felicidades atrasadas.
-¡Gracias!
Dice mientras se sienta a su lado.
Hablaron durante horas, jugaron juntos y se rieron, alegrandose la tarde el uno al otro, sin saber que este encuentros cambiaria sus vidas, sus rumbos, sus destinos...

Justo ocho años depués, en el mismo lugar.

Él sonrie al recordar la primera vez qu la vió, que habló con ella. Eran unos niños desentendidos, que pasaban tardes juntos jugando con la arena, jugando al pilla pilla, disfrutando de la mejor época de la vida...
Ahora, dos adolescentes enamorados. Habian crecido juntos, lo sabian todo el uno del otro, pero eso no parecia suficiente, querian más. De pronto, ella aparece de detrás de un árbol, con la misma sonrisa, que hace ocho años, con el mismo pelos, con los mismos ojos. Para él es como volver al pasado. Se acerca y se sienta a su lado, en el suelo, donde antes se encontraban los columpios.
-Feliz dieciseis cumpleaños.
-Muchas gracias pequeña.
Sonrie. Le encanta que le llame asi, y con tanto cariño.
-¡Toma! Tu primer regalo.
-¿Hay más de uno?
-Ya veremos luego.
Le da un objeto envuelto en papel de regalo de colores. Es plano y rectangular. El lo abre con los dedos temblando. no puede ser. Ya ni acordaba. Es una foto. Ambos eran pequeños. Él le sonreia a la cámara con los ojos entrecerrados a causa del sol, ella peinada con dos trenzas, decoraba con conchas el castillos de arena que habian construido juntos. Se le escapó una lagrima al leer lo que ponia en la esquina de abajo... ''No quiero que nuestro sueños y logros se queden en un simple castillo de arena...''
Él sonrioó mientras ella se ruborizaba.
-Gracias.
No le dió tiempo a terminar .Ella ya habia pegado sus labios a los de él, esperando sentir su calor...