Él te quería. Pero hasta una persona enamorada necesita respirar. Por culpa de tus celos, todos tus miedos se cumplieron. Por culpa de no confiar en el, de no ver que sus amigos también estaban en su vida, lo perdistes. Fue tu culpa, de nadie más. Siento decirlo así, pero él te lo dijo, todos te avisamos, y no lo querrías tanto cuando no supistes parar. No lo amarías tanto cuando bucastes tu felicidad antes que la suya. Y ahora, que hay otra en su vida, es cuando te das cuenta de tus errores. Dicen que más vale tarde que nunca... No es verdad.
Ahora, aprende de tus errores.
Bf.
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